¡¡Viaje al centro de la tierra!!

¡Menudo fin de semana!, ¡qué bien que lo hemos pasado!
Todos y todas estamos emocionados. Para algunos era nuestra primera salida fuera de casa, y algunos/as la primera vez sin papás. Pero eso no ha sido impedimento para pasarlo genial.
En el viaje de ida, nos mareamos un poco, pero los monitores/as estaban ahí para ayudarnos. se nos hizo un poco largo, pero una peli nos distrajo durante un tiempo, y después de repetir muchas veces...¡Monitora, ¿cuánto queda?...llegamos a la zona minera de Escucha.
Como eramos un grupo muy grande tuvimos que dividirnos en dos, y mientras un grupo visitaba la mina, el otro almorzaba y jugaba hasta que nos juntamos de nuevo.
Nos pusieron un gorrito verde como de cirujano y encima un casco, y nos dieron un aparatito parecido a una cantimplora pequeña, nos explicaron que era por si había algún problema. Teníamos que ponerlo en la boca para no afixiarnos ¡qué susto!, pero todo está controlado. Y luego todos al tren...si, si...¡al tren!. Nos montamos todos/as en un trenecito y ala, pa´bajo. Por galerías y túneles nos fueron explicando cómo se extraía el carbón, cómo se trasportaba... la guía lo explicaba muy bien, incluso de vez en cuando nos encontrábamos con maniquís de mineros y hasta una mula.
Al salir nos montamos en el autobús y fuimos al albergue. Allí dejamos nuestras cosas, en habitaciones con literas de tres alturas...¡y todos/as queríamos dormir arriba!
Como llovía un poco, nos quedamos dentro del albergue a jugar y cantar, aprendimos varias canciones...pero ya no me acuerdo muy bien. Había una que el estribillo decía algo así como ; "Somos una familia, un auténtico mogollón..." y en las estrofas teníamos que levantarnos y hacer lo que decía la letra; rascarnos la tripa, hacer cosquillas, tocarnos la nariz, mover el culo...Y también cantamos otra, en dos grupos, y cuando una grupo gritaba los otros bajaban la voz y al revés según indicaba el director de la orquesta. ¡Fue muy divertido! Además podíamos gritar todo lo que quisiéramos porque no molestábamos a nadie.
Luego la cena...¡Um, qué hambre!. Y tras llenar el estómago: la velada. Viajamos al centro de la tierra, y en cada estación nos encontrábamos con unos personajes, ¡Qué gracioso! Los monitores/as se disfrazaron, había uno de Srek, otros de Axtérix y Obelix, un monje, un dragón, un maquinista de tren, Alicia en el país de las maravillas... El maquinista nos iba explicando el juego y avisando del tiempo de que disponíamos. Teníamos que pasar por distintos lugares y en cada sitió realizábamos un tipo de prueba, todas tenían que ver con algún valor; la unión, el esfuerzo, la valentía, la cooperación... Recibimos algún susto, porque estaba oscuro y sólo podíamos llevar una linterna, pero fue una velada muy divertida. Para terminar el día, nos unimos a la celebración que se hacía en Zaragoza. Se celebraba un Encuentro Nacional por la Vida. Hubo una marcha con velas encendidas , y esa noche se encendía una vela por todos los niños y niñas que no habían podido nacer desde que en España se aprobó la ley del aborto. Pedimos para que todos los niños/as pudieran nacer y tener una familia como la nuestra, dimos gracias por nuestros padres y encendimos las velas.
Estábamos muy cansados/as, así que caímos redondos/as en las literas.
Por la mañana y tras desayunar, recogimos las habitaciones y nuestras mochilas y luego seguimos jugando, haciendo pruebas que tenían que ver con la velada de la noche y al final representamos con mimo anuncios que los compañeros tenían que adivinar. Nos daba un poco de vergüenza, pero con los amigos/as se va un poco.
Después de comer y de buscar las cosas que se nos habían perdido salimos dirección a las Cuevas de Cristal. Mientras llegaba el guía permanecimos en el autobús, porque se puso a jarrear a gusto. En la cueva no hacía frio, y era impresionante, ¡que bonito!, además nos dijo el guía que esa cueva todavía estaba viva, es decir, que aún sus estalactitas y estalacmitas estaban creciendo. También nos dijo que un centímetro de estalacmita tardaba 1 siglo en hacerse y que tuviéramos cuidado con no tocar las gotas de agua porque suponía eliminar cientos de años el trabajo de la naturaleza de crear la cueva. ¡Qué impresionante! Nos dijo que se llamaba la cueva de cristal porque sus estalactitas/estalacmitas parecían de cristal. Además había formas muy curiosas: una tarta gigante, un rey mago con su camello y paje, una calavera...y los más imaginativos vimos a la Virgen del Pilar. Fue todo un final de acampada impresionante. ¡Qué bonito!.
Creo que la vuelta ya os la podéis imaginar...tras tantas aventuras terminamos cansados y a pesar de que nos pusieron otra película, la mayoría nos dormimos en el autobús.
Como era domingo, algunos asistimos a la eucaristía de los escolapios de la calle Sevilla, y tras esta la despedida hasta la próxima vez.
Ha sido toda una gran experiencia; un montón de amigos y amigas nuevos, diversión, alegría, fiesta, convivencia, juegos, compañerismo...
Esperamos con ansia la próxima actividad...mientras tanto
disfrutad de las fotos...(tomádlo con paciencia, son 199). En breve colgaremos también los vídeos.

Gracias a todos/as por hacer que Jues-Almadía siga siendo una realidad.